Fortaleciendo el impacto social desde la Corporación Dolores Sopeña-Chile

11 de Octubre 2024

Si partimos de una reflexión general respecto del quehacer público, sin duda que existe un consenso respecto a que actualmente nos encontramos en un mundo dinámico, complejo y cada vez más interconectado. En este contexto, como directivo de un equipo de una organización de la sociedad civil, nos enfrentamos a múltiples retos y que nos […]

Fortaleciendo el impacto social desde la Corporación Dolores Sopeña-Chile

Si partimos de una reflexión general respecto del quehacer público, sin duda que existe un consenso respecto a que actualmente nos encontramos en un mundo dinámico, complejo y cada vez más interconectado. En este contexto, como directivo de un equipo de una organización de la sociedad civil, nos enfrentamos a múltiples retos y que nos demandan respuestas o soluciones que a mi juicio deben tener 2 características fundamentales: ser innovadoras y colaborativas. En este sentido, y desde mi experiencia en varios proyectos de impacto social, implementados en territorios diversos y con públicos vulnerables variados, he constatado una condición virtuosa y esencial para el éxito de dichas acciones: el desarrollo de equipos comprometidos con la causa y las prácticas colaborativas con entidades multisectoriales que posibilitan un impacto sustentable y relevante.

De esta forma, me parece muy pertinente relevar los proyectos comunitarios desarrollados en alianza con A+S UC. En éstos hemos implementado exitosas iniciativas sociales, todas co-ejecutadas exitosamente por alumnos-as de las carreras de Enfermería, Antropología, Química y farmacia, entre otras disciplinas. Gracias a este trabajo hemos contado con más de 120 estudiantes que nos apoyaron en el desarrollo de acciones formativas y en el levantamiento de información que impactaron a diversos actores y sectores de la comunidad de la provincia Cordillera.

Nuestra ruta de aprendizaje partió con la relevancia de contar con miradas “frescas” y conceptuales que nos nutrieron desde los representantes de la academia.  Cada carrera y alumnos-as nos entregaron perspectivas que agregaron valor a las distintas intervenciones. Desde nuestra vereda aportamos con nuestra experiencia sobre la pertinencia, necesidades locales y las variables comunitarias para articular estos esfuerzos en procesos y productos-servicios concretos para la comunidad. Toda esta mancomunión  de talentos, habilidades y recursos nos  ha permitido abordar y profundizar problemáticas desde múltiples ángulos y encontrar soluciones más integrales.

Otro punto que destacaré, basado en nuestra experiencia con el trabajo del taller de primeros auxilios con la escuela de enfermería UC, dice relación con la comunicación.  La fluidez de la información y la coordinación efectiva, fueron pilares esenciales para el éxito del trabajo en conjunto. Esta construcción no fue un proceso espontáneo y determinado, sino que se gestó de manera co-construida estableciendo el valor de la honestidad y respeto en los pedidos y retroalimentaciones. Todo esto se sustenta en reuniones estructuradas que permiten avanzar de manera concreta tanto en los contenidos y conceptos a entregar: el conocimiento del público objetivo, las contrapartes institucionales y las expectativas desde ambos frentes. De estas interacciones aprendimos que una comunicación franca y transparente es fundamental para evitar descoordinaciones, equivocaciones y asegurar que se cumpla el alineamiento integral para lograr los objetivos del proyecto.

Además, en este mismo trabajo, fuimos testigos del gran compromiso del cuerpo  docente y de alumnos-as para con el desarrollo exitoso del proyecto. En esta misma línea, por el logro de un fin mayor, pudimos apreciar la generosidad y  la flexibilidad en sus propuestas, lo que permite potenciar el trabajo y al final juega un papel crucial. De hecho y bajo nuestra experiencia en un proyecto colaborativo, es inevitable que surjan contingencias, cambios y desafíos inesperados. En este caso, juntos enfrentamos con éxito los cambios necesarios para adaptar acciones, encontrar soluciones conjuntas  y avanzar hacia la meta.

Sentimos que un tema particularmente enriquecedor fue el aprendizaje mutuo que se generó entre ambas instancias. En este espacio genuino de colaboración, pudimos intercambiar opiniones, miradas, conocimientos y experiencias, que no solo beneficiaron al proyecto en sí, sino que sentimos gratamente que aportaron en la experiencia global de este tipo de talleres; tanto para nuestra organización  como para la formación de profesionales de la Escuela de Enfermería UC.

En conclusión, nuestra experiencia con A+S UC tiene un gran mensaje: la  colaboración es fundamental para fortalecer el impacto social del  trabajo generado desde la sociedad civil. Esto se corrobora dado que en esta instancia se dan una serie de ingredientes que permiten lo antes citado:  la gran diversidad de miradas, la comunicación transparente, el compromiso y la capacidad de aprender unos de otros generosamente. Al unir nuestras energías,  constatamos que podemos abordar de manera más eficaz nuevos desafíos sociales, construyendo un impacto positivo y sustentable para nuestras comunidades.

Invito fraternalmente a todas las organizaciones de la sociedad civil a buscar oportunidades de colaboración en A+S UC y tener la posibilidad de contar con los talentos y conocimientos que cada participante puede aportar. Solo mediante la construcción en conjunto lograremos dar señales concretas para construir un futuro inclusivo  y equitativo para todos.

 

Igor Arratia Bizama

Director Ejecutivo

Corporación Dolores Sopeña