Contrapartes A+S: Puentes para transformar 

7 de Agosto 2025

En un contexto donde los desafíos sociales y culturales nos interpelan con urgencia, la educación superior no puede permanecer aislada ni centrada únicamente en la transmisión de contenidos. Hoy, más que nunca, necesitamos articular el conocimiento académico con las problemáticas de la sociedad. Este desafío implica no solo innovar en las aulas, sino también generar redes de colaboración sólidas dentro de la universidad. En este propósito, las contrapartes A+S en cada unidad académica cumplen un rol fundamental.

Por Fernanda Penela Quinteros  

¿Quiénes son estas contrapartes? Se trata de docentes que, desde sus facultades o carreras, asumen el compromiso de coordinar, orientar y acompañar la implementación del A+S. No se limitan a tareas administrativas o comunicacionales: son actores estratégicos que permiten que esta metodología se inserte de manera coherente en los programas formativos, que los y las docentes cuenten con apoyo cercano y que las comunidades con las que trabajamos sientan la presencia activa y responsable de la universidad. 

Su aporte es clave porque, gracias a ellos y ellas, las experiencias A+S no quedan como iniciativas aisladas, sino que se transforman en parte de un proyecto institucional con sentido y continuidad. Las contrapartes facilitan la comunicación entre los equipos docentes y nuestra coordinación central, promueven la reflexión pedagógica, impulsan la innovación y sostienen los vínculos con socios comunitarios. Son el puente que permite que el diálogo fluya, que la coordinación sea efectiva y que los aprendizajes se construyan de manera bidireccional. 

Contar con esta red nos permite algo que consideramos esencial: dialogar y encontrarnos. Porque A+S no es simplemente una metodología; es una forma de entender la formación universitaria, donde el compromiso público se vive desde la experiencia, la colaboración y la construcción conjunta de conocimiento. Sin estos espacios de articulación, cada curso correría el riesgo de ser una experiencia individual aislada, en lugar de formar parte de una propuesta mayor que busca consolidar una universidad más pertinente y comprometida con la sociedad. 

El impacto de este trabajo en red es enorme. Nos ayuda a responder preguntas que hoy son centrales para cualquier institución de educación superior, como cómo preparamos a nuestro estudiantado para enfrentar los desafíos complejos del mundo actual, cómo aseguramos que sus conocimientos se pongan al servicio del bien común, y cómo les mostramos que su futuro profesional tiene un sentido ético y social que trasciende lo individual. 

Como Coordinación General de A+S UC, estamos convencidos de que la respuesta no está en acciones aisladas, sino en articular esfuerzos, compartir experiencias y sostener una comunicación constante. Esa es la fuerza de contar con contrapartes en cada unidad académica: no se trata solo de descentralizar, sino de construir una comunidad interna que dialogue, colabore y se fortalezca mutuamente. 

En tiempos donde la fragmentación parece ser la norma, la universidad tiene la oportunidad y la responsabilidad de tejer redes internas que hagan posible el aprendizaje con propósito social. Fortalecer el rol de las contrapartes A+S no es solo un paso organizativo: es una apuesta por la calidad formativa, por el compromiso público y por un futuro donde la educación sea realmente transformadora. 

El camino que viene nos desafía a seguir encontrándonos, dialogando y articulando. 

Fernanda Penela Quinteros 

Coordinadora Formación para el Compromiso Público 

Centro de Desarrollo Docente